Datos personales

Mi foto
Recitais de poesía, lecturas, presentacións de libros, teatro, marionetas, circo, cursos de baile, música, ioga, gastronomía, idiomas... No CAFÉ UF sempre se reuniu dunha forma estable gran cantidade e colectivos. Desde unha radio pirata que durante un tempo emitiu desde aquí a un colectivo anticonsumo, desde unha tertulia de literatura, a un club do viño, desde un colectivo de ciencia ficción a un coro...

27.8.09

DE XARDÍNS, TERRAZAS, CAFÉS... (VI). LAS CROCOSMIAS



LAS CROCOSMIAS EN BLANCO Y NEGRO DE YASUJIRO OZU

Si dios fuese cineasta haría el cine de Yasujiro Ozu. Me conmueve y me fascina. Me convierte en el personaje que sentado en el tatammi lo observa todo a setenta centímetros del suelo, me vuelve un familiar más, me hace japonés -que es como ser de otra galaxia-, incluso logra el milagro de que durante dos horas me transforme en un pequeño burgués, que es la cosa que más desprecio en el mundo. Pero a él se lo permito, porque es bueno, porque es sabio, porque es el Creador, porque es sincero. Aunque odie sus verdades no puedo dejar de quererlo y respetarlo sin reserva alguna. Ante su misteriosa perfección pierdo cualquier atisbo de análisis, de ideología, y me rindo subyugado a su genio. Ya volveré a ser marxista cuando termine la película. Ser un reaccionario inteligente es como ser un penitente, es como un doloroso harakiri realizado con el puñal de las convenciones que se saben estúpidas pero que se creen necesarias para que el orden se mantenga.
Ozu filma con una sublime e invisible nostalgia todo aquello que ama, las personas y sus vidas, los jardines y su alma, las matas de crocosmias mecidas por el viento, y la arena rastrillada en torno las rocas de los jardines zen que parece ser lo único que permanece inmutable en ese Japón de dolorosos cambios, que va dejando desaparecer ante sus ojos distantes e impotentes, su especial forma de vivir y sentir. Largo plano secuencia que deja sin aliento.


Cuando estaba escribiendo esta tercera entrega sobre “TERRAZAS JARDINES CAFÉS PLANTAS…” en el UF se proyecta la película de Ozu “La segunda primavera”, que es una defensa de esa institución monstruosa, nido de todas las violencias, trasmisora de todas la aberraciones, creadora de todos las taras imaginables, generadora de todas las castraciones, refugio de todas las vergüenzas, ocultadora de todas las degradaciones, coartada de todos los miedos y pilar imprescindible del puto capitalismo: la familia. Pero detrás de lo que cuentan los actos y las palabras de sus personajes, está lo que cuentan la mirada de sus actores. Hay una secuencia durante la representación de teatro No a la que asiste padre e hija en la que por medio de las miradas de ésta, se cuenta la historia del desgarro que suponen las convenciones sociales que como corsés ineludibles, obligan a los ciudadanos a ejercer el rol que la tradición tiene previsto para ellos, sean cuales sean sus deseos, su sensibilidad o sus proyectos. Sé que Ozu trata de mostrar lo correcto, necesario y lógico que es que su hija se case y cree una familia como él lo hizo antes. Ozu acepta el dolor que sufre la hija, y también el padre, ante la separación, como un sacrificio necesario para que la estructura familiar se multiplique y garantice que la sangre, la cultura y la tradición de Japón pervivan. Para que la hija lo acepte, tiene que mentirle. ¿Una mentira para que no se derrumbe un edificios hecho de mentiras? Quizá Ozu no puede hacer nada más por la verdad que darnos esa clave, pero es que él ama hasta los tuétanos ese bello edificio que era Japón. Y la resignación ante el sufrimiento, porque el deber y la tradición están por encima de las personas, del dolor de las personas.

¿Estamos a plantas o estamos a películas? (El estúpido chistecito sobre los vascos se supone que quiere decir que son incapaces de pensar y atarse los zapatos la mismo tiempo). Estamos a plantas, pero al mismo tiempo podemos estar a películas, a japoneses, a Ozu y a lo que haga falta. La vida es un inmenso puzle y las piezas encajan con un misterioso plan del que los humildes ateos decimos que ignoramos, y los vanidosos creyentes llaman los renglones torcidos de dios. Pues estaba yo colocando la pieza de este articulillo sobre la crocosmia cuando en la película de la que estoy hablando, me la encuentro inesperadamente filmada por Ozu en tres hermosos planos, en un blanco y negro japonés de 1934. Las mujeres con sus quimonos, sentadas sobre sus pies, inmóviles y calladas, asisten con una seriedad conmovedora a la ceremonia del té. Todo transcurre con una asombrosa serenidad y paz. En la mirada vacía de algunas de las mujeres mayores, podemos observar lo que tienen los ritos japoneses de meditación zen. Por el contrario la mirada de la jóven protagonista indica una fascinación de quien ya lo ha perdido como parte de su cotidianidad. La cámara sale fuera de la casa y se queda inmóvil enfocando las dos columnas de madera del porche y la gran mata de crocosmias que se mueven ligeramente por la brisa bajo el suave sol de la tarde. Después aparece un primer plano de las flores de las croscormias que ocupan toda la parte baja de la pantalla con la ventana de la casa al fondodo, tras la cual sigue teniendo lugar la ceremonia del té. La cámara vuelve a entrar en la casa, las mujeres siguen viendo los gestos rituales de la mujer que está haciendo el té. Otra mujer sirve con palillos, sobre una servilleta, un pequeño trozo de pastel. Sus gestos también son rituales. La cámara vuelve a salir al jardín y ahora, es desde detrás de la mata de crocosmias, desde donde se enfoca la hermosa casa japonesa donde se sigue desarrollando la ceremonia del té. Todo es puro, apacible, lento, suave y hermoso. Está filmado con esa belleza transparente que es exclusiva de Ozu. Un poema de amor, de homenaje a lo que Ozu es, a esa cultura que tanto ama, que trata de defender sin más argumento que mostrar la belleza que Japón ha logrado destilar a lo largo de milenios.
Curiosamente, en esta película que está recorrida subterráneamente por una casi tristeza que transita bajo una casi felicidad, la planta elegida es la crocosmia, una planta que no es originaria del Japón si no de Sudáfrica, pero que ha buscado lugares de climas suaves y húmedos: Inglaterra, la parte central de Chile, Galicia… Aunque Ozu las filma en blanco y negro, conocemos su color, verde claro y mate para las hojas que forman abanicos de cintas verticales en torno a las delgados tallos de los que salen las pequeñas campanillas color azafrán intenso que forman la flor. Es un contraste agridulce, de alegre tristeza. El matiz imposible, perfecto para un pueblo de infinitos matices como Japón, para un director como Yasujiro Ozu que matiza lo invisible creando una belleza inexplicable.


Las crocosmias del la terraza del café Uf no vienen del Japón, ni de Sudáfrica, llegaron de Teis, de Espiñeiro, que está en la falda del monte de La Guía, detrás del astillero de Vulcano, en el estrecho de Rande a través del cual, el Atlántico desemboca en el mar de Cesantes donde está la isla más bella del mundo. La sembraría de crocosmias y cerezos para que Yasujiro Ozu pudiera filmarla. Algún día, en alguna eternidad, en alguna reencarnación, Ozu filmará á Illa de San Simón con su enigmático hechizo japonés, en blanco y negro, con las crocosmias acariciadas por el viento salado “das ondas que grandes son.”

CAFÉ UF
verano del 2009


BEGONIA MACULATA tamén chamada TALO DE CANA


Todo será permitido, inclusive… camiñar nas
tardes cunha inmensa begonia na solapa.
Tiago de Melo


As súas follas son verdes, con máculas de prata brillante. O seu talo de cana pode alcanzar unha altura considerable.
As súas flores colgan agrupadas en redondeles. Son como un outono xaponés, como un plano inmóbil de Kin Ki Duk. Son como suspiros de escarcha ruborizada respirados por un tempo abatido, son como as pingas de sangue que brotaban a través da tea branca que rodea o ventre suicida de Mishima o día que se fixo o seppuku toleado pola dor de ver á súa patria vendendo a súa alma a occidente. Son o coral colgado en ramalletes sonrosados, o xade ensanguentado formando pétaos indescifrables, bágoas de nácar avergoñado.
A begonia maculata é unha das mil cincocentas especies de begonia que se coñecen, orixinarias de zonas tropicais e subtropicais de África, Asia e América.
Adáptase ben a calquera clima sempre que teña sombra, moita humidade e unha terra fértil. E aínda é capaz de florecer en condicións moi adversas.

Non lle gusta o Sol, prefire a Lúa, e non lle importar estar nun interior rodeada de libros e música de Lonard Cohen, sempre que teña luz e auga abundantes.
As begonias son unha das dez plantas máis apreciadas en Europa. A opulenta, vella e anquilosada Europa, tamén ten as súas preferencias en canto a plantas refírese. Levou a súa obsesión pola moda, ao mundo da floricultura. Neurotizada polo consumo incesante exacerbado por unha publicidade omnipresente, toleada por aqueles que viven de explotar a insatisfacción dos xentíos que se manifesta en neurosis de compra compulsiva. Agora ponse a comprar tulipans como posesos, e mañá petunias, ao outro día orquídeas, e ao seguinte gardenias. Como non son capaces de cambiarse a si mesmos, cánsanse de todo o demais. A miseria dos ricos.
Durante un tempo a begonia maculata foi unha das plantas que encabezaban ese ranking de vendas. Os invernadoiros non daban abasto producíndoa. No canto de pedirlle un esquexe ao veciño, as xentes opulentas prefiren comprar a planta nunha grande superficie. Xa ninguén fala co veciño, e menos aínda nas grandes cidades da Europa saciada e hastiada.


Pero, o que caia en desgraza no gusto desas masas yonquis do Prozac, confírelle un encanto sobreengadido. Agora teñen ese alo maldito daqueles aos que a sociedade dálle as costas. A beleza dos desprezados, a maxia dos xitanos, a poesía triste e solitaria dos marxinados.
Sempre me sobrecolleu o silencio quedo dos gatos. E máis aínda, o das plantas abandonadas.
Agora, din os cultivadores de plantas, que os europeos perderon o interese pola begonia manchada.
É raro que estes saciados, con mala conciencia, non creen aínda unha ONG para dar refuxio a todas as maculata abandonadas, eles tan dados a organizarse ao redor de calquera dos problemas que eles crean.

Café UF
Primavera do 2010

26.8.09

DE XARDÍNS, TERRAZAS, CAFÉS... (V). LA ASPIDISTRA


“MANTÉN VIVA LA ASPIDISTRA”

¿Por qué todos esos que adquieren su cultura por medio de películas de éxito y de El País semanal, se empeñan en decir que la frase “Buenas noches y buena suerte” es del George Clooney? Los culturetas más intrépidos van un poco más allá y dicen que es de Edgard R. Murrow, el periodista americano al que da vida glamorosa el galán hollywoodiense. Incluso hay algún vicioso de la urna que se cree que la frase es de la cara afable de la socialdemocracia española, porque el presidente de quienes se consideran españoles, la usó para despedir su debate televisivo.
Pero como todo en la vida, la verdad siempre está debajo de las apariencias. La frase es de ese inglés al que nunca agradeceremos suficientemente su vida, su lucha y su literatura, Georg Orwell. ¿Sabrá el señor Zapatero que la frase proviene de un comunista trotskista, revolucionario, que luchó en la guerra civil española bajo las siglas del POUM y que consideraba a la socialdemocracia la quinta columna de la burguesía dentro de de la izquierda?
¿A qué viene todo esto, si de lo que estamos hablando es de JARDINES, TERRAZAS, CAFÉS, PLANTAS…, y el articulillo lleva el nombre de una planta?
Pues viene a que la famosa frase proviene de una novela de Orwell titulada “Mantén viva la aspedistra”.
La aspedistra es una planta de origen chino que dada su poca exigencia de luz y su resistencia, aguanta perfectamente en los interiores. En Inglaterra, y no sólo en ese país, las casas de la gente acomodada estaban indefectiblemente adornadas con macetas de aspidistra. Tanto, que la planta llegó a simbolizar el apacible, cómodo e inmovilista bienestar burgués. Por ello también, para el protagonista de la novela, la aspidistra representa la muerte del espíritu asfixiado por una comodidad estúpida y reaccionaria. Es posible que la planta no tenga la culpa, pero cuando es capaz de adaptarse tan perfectamente a la mortecina felicidad burguesa, a la enfermiza dicha de los bienpensantes, la vuelven, al menos, sospechosa de connivencia.
Por otra parte el hecho de que se haya adaptado también tan bien dentro del CAFÉ UF, en un ambiente absolutamente contrario, radicalmente contrario, rabiosamente contrario, al de las casas burguesas, supone una capacidad de adaptación muy china. Pero sobre todo las hemos liberado. Ahora crecen en el jardín de la terraza, exuberantes, salvajes, revolucionarias, antiburguesas, bajo la lluvia, bajo el sol, contra el viento, mezclándose con pasionarias proletarias, humildes hierbas, sencillas albahacas y populares geranios, escuchando a ese inglés rojo llamado Billi Brag y asistiendo a cenas de la ASOCIACIÓN DE SOLIDARIEDADE CON KURDISTÁN. Ahora es feliz.
Somos capaces de mandar naves fuera del sistema solar, somos capaces de pasear cámaras por la superficie de Marte, somos capaces de grabar el Sargent Pepper´s, y a estas alturas del 2009 aún no sabemos a ciencia cierta cuantas especies de aspidistra hay.



La aspidistra proviene de China y de Extremo Oriente. En China hay 59 especies de la que 54 son endémicas. En Vietnam se han descubierto 28 especies pero se sabe que hay muchas más. En la actualidad se han clasificado 93 pero se piensa que puede haber entre 200 y 300. Resulta indecente si pensamos en que, por ejemplo, se conocen los nombres de cientos de imbéciles que nacieron con el cerebro en los pies y sus únicas especialidades son jugar al fútbol, decir jilipoyeces y ligarse a modelos. Pero así es la vida de las plantas… y de los animales.
También se llama “Hojas de salón”, “Hojas de lata”, “Hojalata”. Y ese esplendor de grandes hojas de brillante lata cóncava, de estilizadas ojivas de pergamino verde lustroso, esconde la triste realidad de que es una planta sin flor.

DE XARDÍNS, TERRAZAS, CAFÉS... (IV). As Alfavacas

UN CHINO CHEIRANDO
ALFAVACAS NO CAFÉ UF


As alfavacas sedentas piden auga
con refachos de cheiro mediterráneo

O serán abafante de finais de Xullo
exala o seu cansancio sobre os corpos

O verán ardente pasa a sua lingua úmida
sobre a pel derrotada das xentes

Eu escribo poemas entre hortensias e begonias
entre bugabillas moradas e as glicinas malvas


Alfavaca,planta papilonácia de orixe chinesa acios malvas brancas ou rosas

5.8.09

DE XARDÍNS, TERRAZAS, CAFÉS... (III) "EL Glicinio"




UN CHINO BAJO EL GLICINIO DEL CAFÉ UF





Las voces se desplazan invisibles
entre las begonias y las hortensias
se descuelgan por el glicinio que trepa hasta la ventana

La “dulce”
I的 “glicinia”
“glüküs”
gamma lambda kappa ypsilón sigma

Como el verano es frío
alguna flor rezagada
deja caer su racimo malva de “dulce” perfume






10.7.09

DE XARDÍNS, TERRAZAS, CAFÉS... (II) Pasionaria



A gran pasionaria que se vai estendendo por todo o xardín partindo do sebe que hai á dereita, foi plantada no xardín do café UF fai dous anos. A flor da pasionaria é a flor da paixón, pero non da paixón humana, se non da Paixón divina, a do fillo de deus feito home. A súa flor ten a cor morada da Paixón, e o branco da pureza. Ten tamén unha coroa, e os tres cravos da crucifixión. Os cristiáns sempre están dispostos a ver signos divinos detrás das cousas máis absurdas. Poden ver a cara do seu Cristo nun xamón, nas paredes de Vélmez, e unha vez escoitei nun autobús a dúas boas señoras que falaban sobre isto. Unha delas dixo: “desde logo, mira que dicir que se apareceu a cara do noso Señor nun radiador”.
Todo o cristianismo está construído sobre as mentiras de Pablo de Tarso. Son XX séculos de millóns de mentiras, aberracións e absurdos.
Pero a pobre planta non ten a culpa. É unha planta humilde, agradecida, non necesita coidados humanos, crece en terras pobres, e polo pouco que recibe dá xenerosas guirnaldas de follas verde escuro que forman triadas, porque sabe, na súa humildade, que ese é o número perfecto. As súas ramas longas e flexibles utilizan como método trepador longos filamentos que se enroscan como tentáculos a calquera cousa á que poidan agarrarse.



A súa flor non é nada ostentosa. As súas cores suaves confúndense coa follaxe. Hai que fixarse para velas. Case non teñen talo. Son pequenos e pudorosos soles silenciosos, que tremen á tardiña e recóllense cando a luz esmorece . .
Algúns cren que á Pasionaria, a heroica dirixente comunista, púxoselle ese sobrenome porque adornaba o seu pelo con flores da paixón cando de nena lle levaba a comida á mina ao seu explotado pai. Outros pensan que lla chamou así pola paixón que puña nas súas intervencións oratorias. Pero non é certo, por paradoxal que resulte, chamoulla A Pasionaria porque antes de ser comunista, era moi devota. Nunca ninguén me explicou por que os vascos son tan católicos. Se abrazasen outra relixión distinta a dos españois, hoxe serían independentes.
Dolores Ibarruri, ademais, tiña unha nai castelá. Castela sempre viviu o catolicismo dunha forma transcendental. Eu creo que os casteláns sempre viron como unha anormalidade inexplicable o feito de que Terra Santa non estivese na Mancha.
Gústame que esa palabra “mancha”, sexa de orixe árabe, significa “chaira alta”. Gústame porque eses rancios nacionalistas españois crense unha raza única elixida por Deus para salva á súa Igrexa Católica, eses españois intransixentes e dogmáticos que agora preconizan a nova expulsión dos musulmáns inmigrantes, teñen o seu idioma e o seu sangue mesturadas con sangue árabe, xudía, xitana, grega, vasca... E gústame porque, das dúas acepcións que a palabra “mancha” ten en castelán, unha, mostra o seu pasado árabe, e a outra a súa incultura hispanocéntrica. No seu estúpido desprezo polo distinto traduciron historicamente. Canle da “Manche”, non por “Manga” que é o que significa en francés, se non por “Mancha” que é o que parece que significa. Fai falta ser moi tarugo, só así se pode ter encerrados no castelo castelán a pobos que non son capaces, nin o pretenden, de ser tan bárbaros.



Pasionarias, femininas, firmeza e flexibilidade, intelixencia de muller, adaptación, discreción, xenerosidade, desprezo do benestar persoal e a ostentación. Se a Pasionaria fose home o comunismo español, e quizá a historia mesma do Estado Español, fosen distintas. Se fose home, tería sido Secretaria Xeral do PCE en lugar dese Moisés maquiavélico que se encargo de conducir ao sufrido pobo antifranquista, ao longo de case corenta anos, polo deserto do fascismo, ata a terra prometida da democracia burguesa, monárquica-franquista e española. Cando Pasionaria dixo que o eurocomunismo eran “bobadas de Santiaguito”; se fose ela, en lugar se Santiaguito Carrillo, Secretaria do PCE, huberan tido cambado as cousas. Pero era muller, e o PCE nunca tivo unha muller como Secretaria Xeral, aínda que teña unha Pasionaria no seu seo.
A historia é un xardín chedo de malas herbas. .

CAFÉ, UF.
CIDADE, VIGO.

29.6.09

DE XARDÍNS, TERRAZAS, CAFÉS... (I)




(I)

DE XARDÍNS, TERRAZAS, CAFÉS, PLANTAS, FLORES, ÁRBORES, TEIMAS, ABSURDOS, VIOLENCIA, OBSESIÓNS, A ESTÉTICA DOS BURROS, E A ESTÉTICA DE VIOLENTAR A NATUREZA…


A TERRAZA DO UF está posta no que era un pequeno xardín interior doméstico do edificio de principios do S. XX no que está o café da rúa Pracer de Vigo. O gran loureiro que nel hai, plantouse cando se terminou o edificio. Unha fucsia, unha vella hortensia e unha mata de begonias é todo o que queda de cando se abriu o CAFÉ UF. Todo o que agora hai nel, plantouse ou creceu casualmente sen ningún plan determinado, libre, anárquicamente, sen violencia, sen exercer a prepotencia do tolo que quere controlar a pequena natureza baixo a ditadura de caprichos tan absurdos como esteticamente discutibles.
A primeira planta que debe medrar nun xardín (e en calquera lugar) é a da Liberdade. Deixar que a vida medre en liberdade, as plantas saben como teñen que facelo, son intelixentes. Iso que chamamos “millóns de anos de evolución” é unha forma admirable de inteligencia: de adquirir recursos sorprendentes para seguir existindo.
Algunhas das plantas que crecen neste xardinciño, son produto dun longo e intelixente proceso: a planta produce pequenos frutos de cores e sabores que lles gustan aos merlos, estes cómenas tragando con eles as sementes que non son destruídas polo organismo do paxaro que acaba por expulsalas cos excrementos. Despois a terra, a humidade e o sol realizan o final da operación, e crece a planta onde a casualidade decide. Crecen, dan froito e outros merlos cómenos, e vanse outros xardíns, e o proceso repítese. Algo que non é capaz de facer o home, un ser que sempre a caga, pero dos seus excrementos só crecen destrución, desolación e melancolía.
O que chamamos “xardín”, non foi outra cousa que a utilización das plantas e as árbores para criar unha obra plástica vexetal, segundo un plan “humano?” preconcibido. Grandes ou pequenos, interiores ou exteriores, públicos ou privados… os xardíns sempre consistiron en forzar a plantas e árbores a funcionar, non como son, senón como o que o home quere que sexan. Planta, trasplanta, curta e recorta, poda, inxerta, torce e retorce, sementa e arrinca, rexe e dirixe, ata, transforma, cambia… Quere que ese anaco de terra á que vai chamar “o seu xardín”, sexa en realidade unha mistificación da natureza. Na súa concepción da cousas, sempre antropocéntrica, o home tratou á naturaza, non como unha realidade da que forma parte, senón como algo do que extraer beneficio, algo ao que escravizar, forzar, falsear, torturar ou destruír. Iso que chamamos “home civilizado”, nunca se sentiu parte ou aliado da natureza, sempre se creu o seu dono e señor, e actuou como un terrateniente prepotente e desapiadado.



Desde que descubriu a agricultura o home creuse deus. Xa non dependía dos caprichos dos deuses, do clima, ou dos fenómenos naturais para conseguir alimentos. El xa sabía como conseguir frutos, era capaz de crear alimentos, (cousa que antes era potestade dos deuses), o que o asemella a deus, el xa era como dios. O mito bíblico do Xardín do Edén fai referencia a este feito. A expulsión do paraíso é o castigo que Yahvé infrinxe ao home por probar a fruta da árbore da ciencia, é o castigo que dios infrinxe ao home por descubrir a agricultura, a creación de alimentos, arrebatándolles ese poder a deus. Este mito aparece dous mil anos antes da Biblia, nun texto sumerio que conta a lenda de Adán e Eva, a árbore con frutos, a tentación por medio dunha serpe…
A parte máis medorenta desa sociedade onde se dá o grandioso descubrimento da agricultura, é a que cre que dios castigaralles expulsando ao home do paraíso e facendo que teña que sufrir para conseguir o seu sustento. E é esa obsesión por dominar á natureza que arrastramos desde o principio da civilización, a que nos levou a descubrir a agricultura, e a crear xardíns coa patética vaidade de quen se cre dios porque é capaz de crear catro parterres absurdos e podar os setos ata conseguir tapar o seu xardín do xardín encostado contiguo.
A explotación da natureza que supón a agricultura ten un fin de supervivencia, aínda que observando o tolo sistema de produción agrícola á que chegaron os países industrializados, (producen, subvencionados, enormes cantidades de alimentos para destruír, porque non hai suficiente consumo, mentres medio mundo morre de fame), podemos chegar á conclusión de que tamén con este descubrimento o home exerceu o seu papel destrutivo. As inmensas extensións de plástico branco, no norte de Italia ou no sur de España, para lograr un cultivo abusivo en invernadoiros que desertizan terras que eran fértil, son o verdadeiro rostro da tolemia á que o home adoita levar os seus descubrimentos, e neste caso a súa forma bárbara de exercer o seu dominio sobre a natureza. Da mesma tolemia provén a creación deses xardíns de tipo versallesco, cos seus exasperados labirintos de mirta podada en formas antinaturais, os seus estúpidos estanques e os seus rebuscadas estruturas onde nada é natural, libre, verdadeiro. E temos despois a versión cutre do pequeñoburgués co seu xardinciño de segunda residencia, cos súas setiños, coas suas árboreciños, os seus camiñiños empedradiños, os seus enaniñoos do bazar chinés, os seus cenadores de centro comercial… Tan antinaturais como os outros. Pero se ante os burgueses un se cabrea, ante os pequenoburgueses, un non sabe se chorar de vergoña, ou rir de tristeza.

Non importa que un xardín sexa grande ou pequeno, interior ou exterior, público ou privado… ese lugar que construímos para gozar da natureza, para estar en contacto con herbas, plantas, árbores… ten que ser un anaco de natureza libre, no que a man do home nótese o menos posible, se non é posible que non se note.

”¡Non temades nin esteades tristes! ¡Alegravos, máis ben, polo Xardín que vos prometeu!” O Corán

CAFÉ UF
Xuño do 2009

3.6.09

Preséntanos a tua película preferida



PRESÉNTANOS A TUA PERLÍCULA FAVORITA



Unha persoa presentaranos cada xoves a súa película preferida.
A persoa poderá facer unha presentación preparada de antemán, ou se o prefire, contestar as preguntas de quen actúe de presentador por parte do cine-clube UTOPÍA CINEMA. (Dende cando é a túa película preferida? Qué é o que máis che gusta dela? Cal é a tua escea preferida? Cal e o diálogo preferido? etc.

As proxeccións farnase en pantalla grande no local do cine-clube UTOPÍA CINEMA, rúa do Pracer 19 sótano.
A presentación comenzará as 20 h. A película proxectarase a continuación, nunca despois das 20,30.



24.2.09

“Etiquete”- Rotozaza




ALT.o9 festival alternativo das artes escénicas de Vigo. Do 27 de febreiro ao 15 de marzo de 2009.
En Vigo podense facer moitas cousas: pasear polas praias, subir o Castro, visitar museos, comer ostras, adiviñar que tempo vai facer ollando o ceo entre os edificios, subir as súas maravillosas costas (e baixalas ainda que esto e menos aventureiro e divertido). Habia unha cousa que non se podia facer ata hai oito anos en Vigo y era ver teatro e danza contemporáneas. Non hay mais que ollar os xornais de enton e ver qué pasaba por aqui. Si. Estaba a programación do grande e único teatro da cidade si, pero nada máis.
Un día… Seguir en...


“Etiquete”- Rotozaza

ROTOZAZA: Cuando el público es también el actor

Por Jason Zinoman Publicado: 15 de agosto de 2007



Hamton y Mercuriali fundaron ROTOZAZA (nombre de una escultura del artista suizo Jean Tinguely) en 1998 después de una reunión en un taller de teatro en Italia. En principio empezaron experimentando con artistas invitados, de la misma forma que se ayuda a un amigo a superar sus miedos. Escribieron entonces una obra de teatro para ser utilizada en esas situaciones, en las que órdenes llegarían a través de los auriculares.

Todo productor de teatro acaricia un sueño: ¿no sería posible hacer teatro prescindiendo de los actores?
Piense en las ventajas: no hay discusiones sobre las condiciones del contrato, no hay berrinches. Pero la terca realidad es que, si bien se puede reemplazar a los músicos con los ordenadores y los directores autoritarios con la improvisación, el teatro en directo necesita contar con actores.

Silvia Mercuriali, 30 años, y Anthony Hampton, 32 años, son el equipo artístico detrás de Rotozaza, una activa empresa cultural con sede en Londres y con una creciente reputación en el circuito de teatro experimental.
Ellos han encontrado la solución al problema de los artistas, intérpretes o ejecutantes molestos y consiguen darle al público algo nuevo que ver: a ellos mismo como protagonistas.

La compañía ya había estado practicando una forma inusual de teatro: montaron obras de teatro conceptual y psicológico sobre la vigilancia, la comunicación y el amor en la actualidad, utilizando una mezcla de actores y artistas invitados a los que se le dice qué hacer y decir, por medio de una voz en off de inspiración orwelliana. Esta estética de distanciamiento y frescura se basa en el hecho de que los espectadores se preguntan si el actor invitado conoce de antemano lo que está interpretando o por el contrario solamente se dedica a actuar siguiendo las instrucciones que se le dan en tiempo real.

Pero si en estas obras la línea entre la audiencia y el intérprete parece borrosa, la última creación de Rotozaza, titulada “PROTOCOLO” y creada por el pionero de medios digitales Paul Bennun, la borra por completo.

En esta nueva obra solamente pueden participar dos personas a la vez. En ella se requiere la participación de sod personas que se converiran en los actores que que habrán de seguir un guión realizado para ambos. El espectáculo convierte el punto más creativo de cada conversación en una improvisada performance.
“PROTOCOLO” se inauguró en Londres y se represento ya en Portugal, Argentina, Alemania, Noruega, Italia y EE.UU.

”Mi esposa y yo asistimos (en otras palabras, protagonizamos) “PROTOCOLO" recientemente en Edimburgo.
Aunque “PROOTOCOLO" no era técnicamente parte del programa oficial del Edimburgo Festival Fringe, se estuvo realizando durante todo el tiempo que duró el Festival en una de las mesas reservada para ello en el café Nova Aurora. Al entrar, un hombre en el bar nos proporcionó dos CDs y nos condujo a una pequeña mesa equipada con una serie de objetos y dos reproductores de DVD. Nos sentamos, nos pusieron un par de auriculares, y el show comenzó. "Respire profundamente e intente aclarar su garganta", me dijo una mujer con autoridad y con acento inglés, antes de explicar que la mesa que tenía ante mí era una primera etapa y yo era un actor que no conocía mi papel.
Era la noche de la apertura y la sala estaba llena de gente. Cuando me instalé en este pequeño escenario en esta obra de teatro, la voz me ordenó que cerrase los ojos e imaginase un café de París. La siguiente cosa de la que se me contó fue que estaba en medio de una película de Jean-Luc Godard: mi esposa y yo estábamos repitiendo las líneas de "Vivre sa vie" la película que dirigió el director francés en 1962.”

Durante gran parte de "PROTOCOLO" (que comienza cada media hora, de 11:00 a 23:30), los participantes llevan auriculares y mantienen una tranquila conversación; mientras las otras personas que están en el café, posiblemente no se enteren de que la obra se está representando.

Después participó un viejo filósofo tratando de iniciar una conversación con una bella desconocida. Fue un intercambio extraño, pero que no resultó sobreactuado. Hubo una pausa incómoda. "A menudo me pasa a mí", dijo mi esposa, repitiendo el diálogo. "Yo sé lo que quiero decir. Pienso antes de hablar para comprobar si es realmente lo que debería decir. Pero cuando llega el momento de hablar: Pfft! No puedo decirlo." Después de tomarnos algo, se encogió de hombros y me dijo: “sus actos no están escritos. Usted no es un personaje de una obra de teatro." La escena se convirtió rápidamente a una lucha melodramática del Ibsen de "Casa de Muñecas", y de ahí pasó a un acalorado enfrentamiento entre los amantes. Golpeé con el dedo a mi esposa. Ella giró su silla para salir.”

"Hay algo muy raro y especial cuando dos personas se encuentran encerradas en una burbuja dentro de un espacio público", dijo Mercuriali en una entrevista. "Es como cuando dos personas tienen un verdadero intercambio de ideas o cuando se están enamorando. Es ese sentido de evento y de momento el que estamos tratando de recrear"


Este texto foi traducido ao castelán do ingles dun articulo publicado polo New York Times.


“Etiquete”- Rotozaza. É a obra que se representa no café uf do 27 de febreiro ao 4 de marzo